20090805

Cada quien habla de cómo le fue en la feria

Alguna vez alguien nos ha dicho es que estás siendo subjetivo, no ves las cosas claras, tienes que ser objetivo; pero la verdad de las cosas es que ese alguien tampoco es objetivo.

Y he aquí: que en esta esquina, de calzoncillos blancos, pesando 10 kilos tenemos a la OBJETIVIDAD; y en esta otra, de calzoncillos negros, pesando 20 kilos tenemos a la SUBJETIVIDAD.


En términos simples uno pertenece al SUJETO y el otro al OBJETO.

Pero dejemos la simpleza y vayamos a la complejidad:

OBJETIVIDAD (1): es la cualidad de lo objetivo, de tal forma que es perteneciente o relativo al objeto en sí mismo, con independencia de la propia manera de pensar o de sentir (o de las condiciones de observación). Ontológicamente (Ontología es una parte de la metafísica que trata del ser en general y de sus propiedades trascendentales) la objetividad reside en la INVARIANZA del objeto, o sea, lo que es real lo es por que es invariable: el día y la noche, por ejemplo. Desde Kant la objetividad es definida como validez universal, con independencia de la religión, cultura, época o lugar. En un sentido ético al expresar un juicio hay que abandonar las ideas, creencias o preferencias personales, con la única finalidad de acercarse al objeto de manera IMPARCIAL.

La OBJETIVIDAD a la que se refiere ese alguien del principio es esa, la ética. Es algo como esto: En frente tengo un vaso de cristal que contiene en su mitad inferior agua y en su mitad superior aire; o el programa X que pasa en la televisión cumple con su objetivo primordial, que es el de entretener y, por lo tanto, es un buen programa. (Me pregunto cuántos hablamos así)

SUBJETIVIDAD (2): es la propiedad de las percepciones, argumentos y lenguaje basados en el punto de vista del sujeto, y por tanto influidos por sus intereses y deseos particulares. Sociológicamente, se refiere al campo de acción y representación de los sujetos condicionados a circunstancias históricas, políticas, culturales, etc., particulares. La filosofía considera a la subjetividad como la interpretación de un sujeto acerca de una experiencia, es única para cada sujeto y fundamenta sus opiniones personales basados en esa experiencia.

La SUBJETIVIDAD es la manera en que percibimos los objetos y está afectada por nuestro entorno, nuestra educación, nuestros gustos y deseos. Tomando los ejemplos anteriores: El vaso está medio lleno, o medio vacío; el cristal del vaso está bonito. El programa X es una porquería, no me gusta. (La mayoría nos expresamos así)


No les he dicho nada del otro planeta, sólo quiero dejar en claro que como dice aquel dicho: "Cada quien habla de cómo le fue en la feria," es realmente muy raro que alguien exprese una opinión objetiva sobre algún hecho.


La VERDAD es RELATIVA, porque MI VERDAD (empañada de mi subjetividad) Y TU VERDAD (empañada con tu subjetividad) SON DISTINTAS, aunque pueden coincidir en algunos puntos usualmente los regidos por la cultura. Pero no me crean, probablemente este escrito esté lleno de subjetividad, pues es mi propia interpretación de un par de términos, aunque procuré ser lo más objetiva posible.

Siempre he pensado que para alcanzar la VERDAD ABSOLUTA, o al menos acercarse a ella, hay que ver las cosas desde todas las verdades relativas; así, si uno no se enreda entre tantas verdades, podrá vislumbrar el brillo de la VERDAD.

Así que recuerden:


TODO
LO
QUE
INTERPRETAMOS
ES
SUBJETIVO

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