20090811

Es cuestión de principios

Empecemos como de costumbre con una definición, porque, eso de principios suena a muchas cosas y quién sabe si todos entendamos lo mismo. Así que vayamos al diccionario...

Principio:

1. Primer momento de la existencia de una cosa.
2. Punto inicial o primera etapa de algo extenso.
3. Causa primitiva o primera de algo.
4. Rudimento de una ciencia o un arte.
5. Componente de un cuerpo.
6. Fundamento,aseveración fundamental que permite el desarrollo de un razonamiento o estudio científico.
7. Máxima, idea o norma personal que rige el pensamiento o la conducta.


Ahora si... vayamos al grano...

Empecemos, no por el principio, sino por la última definición:

MÁXIMA, IDEA o NORMA PERSONAL que RIGE el PENSAMIENTO o la CONDUCTA.

Es decir, una serie de reglas autoimpuestas que nos permiten conducirnos ante los demás... si, leyeron bien REGLAS AUTOIMPUESTAS, un código personal que en nada o poco tiene que ver con las reglas que nos impone la sociedad. Son respuestas conductuales con las que respondemos a ciertas situaciones, pero nadie nos las ha enseñado.

Recurriendo a la típica pregunta de cuestionario del Facebook...

Te gusta el mismo tipo/a que a tu amiga/o, tú:
a. Te lanzas, total no es su novio/a
b. Te quedas quieta/o y dejas que tu amiga/o se lo/a quede
c. Hablas con tu amiga/o y nadie hace nada
d. Hablan y ven si al tipo/a le agrada alguna/o y actúan en función a eso

En realidad no hay una respuesta que sea más adecuada que la otra, lo que importa es cuál es la más adecuada para cada quien. Cuál nos va a llevar a un buen término, cuál no nos causa remordimientos, ni culpas... de eso se tratan estas reglas, estos principios; de saber qué es lo mejor para nosotros mismos según nosotros mismos...

Es común que, cuando se nos presenta una oportunidad, sin adjetivos, una simple oportunidad, corremos a preguntarle a nuestra pareja (en caso de que exista), a nuestro mejor amigo, a nuestros padres, al vecino o a cualquiera que, supuestamente por estar fuera de nosotros, ve las cosas más objetivamente... lo cierto es que ese agente externo lo ve en función de sus necesidades, no de las nuestras; no importa cuánto conozca nuestra situación personal, él verá la oportunidad según sus prejuicios, sus ideales y sus necesidades, aquellas cosas que le han inculcado a través de la televisión y los medios para que sea FELIZ, y que no necesariamente son iguales a los nuestros.

Y en todo este proceso de decisión, es raro que nos preguntemos a nosotros mismos ¿Y tú qué opinas? ¿Cómo ves esta oportunidad? ¿Crees que sea lo mejor para mi?

Pongamos un ejemplo:

Nuestro sujeto X, tiene un empleo bien remunerado, trabaja 8 horas, tiene 1 semana de vacaciones, hora de comida; cuando sale de trabajar tiene tiempo para ir a ver a su pareja unas horas, salir con sus amigos y próximamente tomará un curso de pintura, su gran pasión, de una hora diaria. Los fines de semana pasa tiempo con sus padres y de vez en cuando se va al estadio a ver el fútbol. Su salario le permite llevar una vida holgada y sin deudas, ya que sabe administrar bien, tanto su tiempo como su dinero.

Un buen día su jefe le llama y le informa que hay un puesto disponible, el salario es dos veces más grande, pero ya no tendría vacaciones ese año o tal vez disminuirían, teóricamente el trabajo es de 8 horas; sin embargo, también tendrá que trabajar los sábados. Es probable que tenga que asistir a reuniones y juntas fuera de horario laboral e incluso llevar el trabajo a casa. Esas ocasiones especiales, no podría ver a su pareja y definitivamente tendría que olvidarse del curso de pintura, del fútbol y de visitar a sus padres. Esto no es como un ascenso, es más bien un cambio a otra área, una, que por cierto X detesta. El jefe le dice a nuestro sujeto X que tiene 24 horas para decidir... Después de ir todo el camino desde la oficina de su jefe hasta su escritorio dándole vueltas al asunto, el cerebro de X sufre un colapso y le es imposible pensar claramente.

Como en toda oficina relativamente pequeña, el chisme ha corrido como pólvora y todo el mundo sabe que X tiene posibilidades de irse de ahí. Z, el que se sienta enfrente de X en el trabajo, hombre que le debe la mitad de su alma al diablo y la otra mitad a los bancos, que está harto de su esposa y agradecería pasar más tiempo en el trabajo, se acerca a X y le dice: "yo no sé porqué te lo piensas tanto, es buen dinero el que t van a dar... ya quisiera yo oportunidades como esa."

X le llama a sus amigos para ir a comer con ellos, en la sobremesa les comenta de la oportunidad que tiene...

Su amigo A, humano al que los demás ven como loco, metido en negocios propios, hablador compulsivo que siempre dice que le va de maravilla, pero que jamás lo demuestra; presume de tener todo el tiempo del mundo, pero jamás cuando quieren hacer una reunión, y que al ritmo de "lo primero es el negocio" ha dejado de ver a su novia, le dice a X: "¡Que gran oportunidad! Así puedes desarrollarte y crecer y estarás a un paso más de ser como yo. Vamos cosas así no se dan todos los días."

A esta respuesta, el amigo B, interesado en escalar posiciones sociales, en mantener un status y un estilo de vida, aún a costa de mucho polvo en su guitarra eléctrica, una tumba sobre sus aspiraciones musicales y un trabajo que detesta, responde: "Pues míralo de esta manera, tendrás más dinero, podrías cambiarte de casa y en vez de andar con eso de aprender a pintar podrías comprarte un Picasso o un Matisse. Es para mejorar."

Su amigo C, probablemente el más sensato de los 3, despreocupado, medio vago y que hay meses que apenas sobrevive y otros en los que se da muchos lujos, le dirá: "En lo personal, yo no lo tomaba... pero claro, yo preferiría el curso de pintura, o esas tardes de chelas... si ya eres el único que jala... además a ti nunca te ha latido eso de estar metido en el área tal. Pero bueno, como tu quieras, tu sabes mejor que yo lo que es bueno para ti."

X se quedará con cara de que-gran-ayuda-me-diste. Regresará al trabajo con dolor de cabeza y una incapacidad para decidir. Saldrá del trabajo, se dirigirá a la casa de su pareja y en el transporte público tratará de discernir los pros y los contras, pero entre gritos, claxons, música a todo volumen y mucho tránsito, su cerebro quedará igual que las calles: atascado.

Al llegar a casa de D, su pareja, X le contará y entre una indecisión terrible, pues si bien el dinero extra les permitiría casarse, X ya no estaría tiempo suficiente con D por el exceso de trabajo. Y X regresará a casa con un lío en la cabeza, pensando q Z tiene razón o A o B o C o D...

¿Qué le diría usted a X querido lector?

Bueno, X, después de darse un baño, tomarse un café caliente y ver un poco de tele, seguirá pensando sin ver que:

*Z quisiera esa oportunidad porque NECESITA DINERO y un pretexto para no estar en casa
*A está obsesionado con el trabajo y está sacrificando cosas importantes, pero él cree que ese es el camino correcto
*B sacrificó sus sueños sólo para obtener lo que le dijeron que era lo correcto
*C de vez en cuando sacrifica lo económico, pero siempre lo ve satisfecho
*D QUIERE CASARSE, pero las bodas son caras y si no tiene a su pareja cerca como se van a casar
*Lo que realmente importa es lo que él quiere.

X debería evaluar, en función de lo que quiere y lo que tiene, si la oportunidad es buena para él... dejaremos a X pensando...

Después de tanto rollo me dirán y esto que tiene que ver con los principios... bueno, es que para crear nuestros principios tenemos que basarnos en nosotros, nuestras decisiones y respuestas conductuales deben estar determinadas según nuestras necesidades, nuestro conocimiento, lo que hemos aprendido y racionalizado. Los principios deben ser un código que nos permita llevar a buen término nuestras metas; esto debe incluir actitud frente a la vida, respuestas morales, cívicas y físicas. Aquí nuestra séptima definición de principio se une a la cuarta:

RUDIMENTO DE UNA CIENCIA Y UN ARTE.

Y como vivir es un arte en si mismo, estas normas personales que rigen nuestra conducta se convierten en el rudimento, el fundamento, del arte de vivir en el propio pellejo. Y como fundamentos, son el origen (segunda definición) de lo que será el resto de nuestra vida, que, como dice mi amigo Manzana, debería ser por un camino que nos lleve a la FELICIDAD...

Así que recuerden...

TODO
ES
CUESTIÓN
DE
PRINCIPIOS

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